Una biopsia con aguja es un procedimiento que permite obtener una muestra de células del cuerpo para hacer análisis de laboratorio. Los procedimientos convencionales de biopsia por punción incluyen la aspiración con aguja fina y la biopsia con aguja gruesa. La biopsia con aguja se puede usar para tomar muestras de líquido o tejido de los músculos, huesos y otros órganos, como el hígado o los pulmones.
Es posible que el médico sugiera una biopsia con aguja para facilitar el diagnóstico de una afección médica o para descartar una enfermedad o afección.
La muestra de la biopsia con aguja puede ayudar al médico a determinar cuál es la causa de lo siguiente:
- Una masa o bulto. Una biopsia con aguja puede revelar si una masa o bulto es un quiste, una infección, un tumor benigno o cáncer.
- Una infección. Los análisis de una biopsia con aguja pueden ayudar a los médicos a determinar qué gérmenes causan una infección para que tu médico pueda elegir los medicamentos más eficaces.
- Inflamación. La muestra de una biopsia con aguja puede revelar qué provoca la inflamación y qué tipos de células se ven afectadas.
También es posible que te sometas a pruebas por imágenes, como una tomografía computarizada (TAC) o una ecografía, antes de la biopsia con aguja. Algunas veces, estas pruebas se usan durante el procedimiento de la biopsia con aguja para ubicar con más precisión el área donde esta se realiza.